Principios para el Líder

Principios para el Líder X – HUMILDAD



Daniel 4:24-31

“Esta es la interpretación, oh rey, y la sentencia del Altísimo, que ha venido sobre mi señor el rey: Que te echarán de entre los hombres, y con las bestias del campo será tu morada, y con hierba del campo te apacentarán como a los bueyes, y con el rocío del cielo serás bañado; y siete tiempos pasarán sobre ti, hasta que conozcas que el Altísimo tiene dominio en el reino de los hombres, y que lo da a quien él quiere. Y en cuanto a la orden de dejar en la tierra la cepa de las raíces del mismo árbol, significa que tu reino te quedará firme, luego que reconozcas que el cielo gobierna. Por tanto, oh rey, acepta mi consejo: tus pecados redime con justicia, y tus iniquidades haciendo misericordias para con los oprimidos, pues tal vez será eso una prolongación de tu tranquilidad. Todo esto vino sobre el rey Nabucodonosor. Al cabo de doce meses, paseando en el palacio real de Babilonia, habló el rey y dijo: ¿No es ésta la gran Babilonia que yo edifiqué para casa real con la fuerza de mi poder, y para gloria de mi majestad? Aún estaba la palabra en la boca del rey, cuando vino una voz del cielo: A ti se te dice, rey Nabucodonosor: El reino ha sido quitado de ti.

La humildad, según S. Ventura, es “aquella actitud que reconoce el propio lugar bajo la condición de criatura de Dios, opuesta a la presunción, afectación u orgullo.” Añade que “la persona humilde reconoce su dependencia de Dios, no busca el dominio sobre sus semejantes, sino que aprende a darles valor por encima de sí mismo.” (Comp. Fil 2:3)

El líder piadoso y humilde reconocerá que Dios es Quién ha permitido que llegue a ese lugar. Nada de lo que pasa en la tierra está fuera del filtro de la voluntad de Dios, pues el Altísimo” es soberano, Él tiene el dominio en el reino de los hombres, y lo da a quien él quiere(Dn 4:32). No importa si es un rey o un líder pagano, o si es un pastor o un líder creyente en una empresa exitosa, el olvidarse de Quien reina y de Quien viene toda bendición y posición es un grave error.

Nabucodonosor había llegado a conquistar un gran imperio, pero su corazón se había llenado de orgullo, creyó que todo lo que había conseguido era resultado de su propio esfuerzo y poder, y no consideró en nada lo que Dios le había permitido y otorgado. Recibe una visión que venía con la advertencia del juicio de Dios (Dn 4:10-18). Daniel le explica el significado de la visión, pero también le da una última advertencia llamándolo al arrepentimiento y a su humillación ante Dios (Dn 4:27). Lamentablemente el rey no escuchó y a los doce meses el castigo llegó (Dn 4:28-31).

Dios requiere de líderes humildes, aquellos que lo reconocen y ante Quien se humillan para buscar guía y ayuda; entienden que del Señor viene toda autoridad y que lo que han recibido es por Su gracia y misericordia. Si un líder no se humilla ante Dios, entonces Él lo humillará (Sal 147:6).

«Ante la grandeza y santidad de Dios lo que corresponde al ser humano es adoptar una actitud de rechazo a toda pretensión u orgullo, inclinándose ante él en pleno acatamiento de su voluntad» Lockward, A.

Daniel 4:37

“Ahora yo Nabucodonosor alabo, engrandezco y glorifico al Rey del cielo, porque todas sus obras son verdaderas, y sus caminos justos; y él puede humillar a los que andan con soberbia.”

Deja un comentario