Salmos 119:89-96
“89 Para siempre, oh Jehová,
Permanece tu palabra en los cielos.
90 De generación en generación es tu fidelidad;
Tú afirmaste la tierra, y subsiste.
91 Por tu ordenación subsisten todas las cosas hasta hoy,
Pues todas ellas te sirven.
92 Si tu ley no hubiese sido mi delicia,
Ya en mi aflicción hubiera perecido.
93 Nunca jamás me olvidaré de tus mandamientos,
Porque con ellos me has vivificado.
94 Tuyo soy yo, sálvame,
Porque he buscado tus mandamientos.
95 Los impíos me han aguardado para destruirme;
Mas yo consideraré tus testimonios.
96 A toda perfección he visto fin;
Amplio sobremanera es tu mandamiento.”
Los monumentos se encuentran en muchos lugares de nuestras ciudades y países, en donde quiera que vayamos miramos un recordatorio de algún evento, esta es la idea que el Salmista tiene para dirigir nuestra mirada al cielo, en donde hallamos el recordatorio de la Palabra de Dios.
Este pasaje nos recuerda el pasaje de Genesis 1, cuando leemos que Dios con SU Palabra creo los cielos y la tierra, y todo lo que en ella existe.
Al mirar lo que Dios hizo, podemos mirar que todo ha permanecido hasta ahora, y esa es una manifestación de la fidelidad de Dios que permanece de “generación en generación”.
En Colosenses vemos que es Cristo quien sustenta todo con Su poder (Col. 1:16-17), y que todo fue creado para su propósito.
Y con esa mirada a la fidelidad y el poder de Dios y de Su Palabra, el salmista mira con esperanza lo que enfrenta, y en Ella se deleita. !Cuan increíble perspectiva! (v. 92).
Así como Dios es fiel, el autor expresa su deseo de mantenerse fiel a la palabra de Dios, recuerda que es creación de Dios, y con ese sentido de pertenencia le pide que lo ayude. (v. 93-94).
Y termina diciendo que todo tiene fin en la tierra, pero que la Palabra de Dios es infinita (v. 96)
Iglesia Bautista Betel 