Gálatas 3
“¡Oh gálatas insensatos! ¿quién os fascinó para no obedecer a la verdad, a vosotros ante cuyos ojos Jesucristo fue ya presentado claramente entre vosotros como crucificado? 2 Esto solo quiero saber de vosotros: ¿Recibisteis el Espíritu por las obras de la ley, o por el oír con fe? 3 ¿Tan necios sois? ¿Habiendo comenzado por el Espíritu, ahora vais a acabar por la carne? 4 ¿Tantas cosas habéis padecido en vano? si es que realmente fue en vano. 5 Aquel, pues, que os suministra el Espíritu, y hace maravillas entre vosotros, ¿lo hace por las obras de la ley, o por el oír con fe?”
Introducción:
- ¿Qué fue primero, el huevo o la gallina? Con esta pregunta queremos mencionar que todo tiene un orden lógico de las cosas en la vida que deben ser aceptadas por sentido común.
- La obra del Espíritu Santo es una obra poco entendida por los creyentes, y eso genera controversias en la iglesia.
- El papel del Espíritu Santo antes, durante y después de la salvación del creyente en la era de la Gracia tiene un sello característico único que debe ser considerado bíblicamente.
Proposición:
Un creyente es convencido para salvación (antes de la conversión), es nacido de nuevo (durante la conversión), es transformado (después de la conversión), y guardado para la redención (desde la conversión hasta el final), todo gracias a la obra del Espíritu Santo.
- Llamado de atención. (v. 1)
- Por la falta de mente o razonamiento. (v. 1a)
- Por dejarse encantar por falsas representaciones. (v. 1b)
- Porque todo ello los alejó de la verdad. (v. 1c)
- ¡Cristo ya fue crucificado!
- Llamado de reflexión. (v. 2)
- El Espíritu Santo nos convence del pecado. (Jn. 16:7-11)
- El Espíritu Santo nos hace nacer de nuevo. (Tit. 3:5)
- El Espíritu Santo mora en el creyente. (Jn. 14:17; ; 1 Co. 3:16; Ef. 2:22; Stg. 4:5)
- El Espíritu Santo es quien nos transforma. (2 Co. 3:18)
- El Espíritu Santo es nuestro sello de salvación. (Ef. 1:11-14)
- El Espíritu Santo vivificará nuestro cuerpo muerto. (Ro. 8:11)
- Llamado de conclusión. (v. 3-5)
- Confiar en la carne es de necios. (v. 3a)
- Confiar en la carne es degradar la salvación. (v. 3b)
- Todo lo que han experimentado no ha sido en vano. (v. 4)
- ¡No puede ser que no les hayan servido para nada!
- La obra de Dios vino a causa de la fe en el Evangelio. (v. 5)
- Dios nos otorgó de Su Espíritu.
- Dios obra maravillosamente en la iglesia.